geminis amor : El camino de la disciplina

por | |
El camino de la disciplina
cancer amor geminis amor amarres amor


El camino de la disciplina

Sitios Web Recomendados:

- Versos y Poemas para Enamorar
- Decoracion para Bodas
- matrimonios y bodas




Hola de nuevo!
Lamento la demora en volver a escribir. Este ha sido un semestre de trabajo bastante duro y realmente es poco el tiempo que me queda para escribir. He tenido que replantear mis horarios con el fin de no tener que descuidar nada. Algunos proyectos están un poco retrasados, espero dar abasto con todo y sobre todo espero la paciencia de ustedes, apreciados lectores. Estoy seguro que pronto lograré ponerme al día con todo lo que me hace falta.
Este blog cada vez se encamina más hacia el juego interno y menos hacia las fórmulas, quizá existen estrategias que sigo planteando y plantearé en la forma en que hombres y mujeres se relacionan, y en cómo poder entender la mente femenina, o cómo responder a las jugadas más frecuentes y evitar trampas. Mi filosofía actual es que con un sólido juego interno no hace falta mucho, un sólido juego interno te garantizará ser un motor de atracción, las mujeres irán a ti, no hará falta empezar a buscar y buscar como si estuvieras mendigando o pidiendo trabajo. Simplemente te sentarás en un estado de control, de relajamiento, de libertad y de seguridad y confianza, y el mundo, las demás personas lo notarán y querrán eso de ti. Por eso, aunque algunos me escriben diciéndome que necesitan formulitas, eso ya poco lo encontrarán, porque la evolución personal de este blog y la mía propia me están enseñando que de poco valen, y que lo más importante es crear “estados” que te permitan ser creativo, ingenioso, meterte en la piel de aquello que quieras mostrar, por ejemplo, si deseas mostrarte como una persona divertida, o si quieres mostrarte como alguien intelectual, o como alguien apasionado por la música, o como alguien revolucionario, lo que sea lo puedes hacer generando estados. Es como ser un actor, ser diverso.
En días pasados estaba hablando con un estudiante de seducción, y entre las cosas que aprendíamos era a mostrar diferentes facetas de uno mismo, y constantemente ir creando “personajes” que vayan enriqueciendo la personalidad que reflejas y manifiestas. Qué gran cosa es cuando una mujer te dice “wow, vaya, no sabía que te gustaba/hacías eso… eres una caja de sorpresas”. Cuando oigo esto algo dentro de mí dice “¡Sí! ¡Lo logré!” Crear sorpresa, es lo mejor que puedes tener para generar atracción. Muchas mujeres tienden a aburrirse, incluso si están al lado de lo que se puede llamar machos alfa u hombres dominantes, pues son planos, aburridos, la novedad se pasa fácilmente y por eso he visto a muchas mujeres dejar a machos alfa por hombres beta pero que son mucho más interesantes, dinámicos, diversos.
Lo que quiero que aprendas es que en la seducción no todo es como parece: de repente ves a una mujer rodeada de un hombre atractivo y te encuentras a ti mismo diciéndote “vaya, esa mujer debe estar muy bien con ese tipo, no tengo opción”, pero quizá lo que sucede es que ella está aburrida porque ese mismo tipo es plano, no representa para ella ningún reto intelectual, sólo es el accesorio para mostrar (sí… a los hombres también nos usan como accesorios con los cuales las mujeres quieren mostrar poder, belleza, dinero, etc). Hace mucho tiempo aprendí, y ojala pronto tú lo aprendas, a no dejarme llevar por las apariencias, por las emociones del momento, he visto muchas parejas felices en las fiestas, pero al llegar a la casa todo es un infierno. Mujeres que no hacen sino soñar con una vida normal, con un hombre normal, que sea un reto para ellas, que les de paz, que les de felicidad.
Hay un libro muy bueno que no me canso de recomendar, se llama “El arte de la seducción” de Robert Greene, no es un maestro de la seducción al estilo anglosajón, es un filósofo e historiador que ha investigado los arquetipos o claves de la seducción y del poder, y en esa obra hace un recorrido por todos los prototipos de seducción. Leyéndolo uno se encuentra con muchas sorpresas, con principios psicológicos que desafían las más populares teorías de Mystery y otros expertos. Al leerlo y complementarlo con mis vivencias personales encuentro que no necesariamente tienes que llegar a ser un cierto tipo de hombre para lograr seducir, lo que realmente necesitas es descubrir tus puntos fuertes, ser consciente de tu personalidad, de tus rasgos y elevarlos.
Ahora bien, hubo muchos momentos en mi vida en los cuales no tuve confianza en mí mismo. Mirando hacia atrás encuentro periodos en mi pasado donde tenía muchas dudas, tenía muchos miedos, sentía que no iba a ninguna parte, me sentía imperfecto, me sentía poco atractivo, me sentía desadaptado, constantemente estaba triste, pesimista, frustrado. Era la verdad, creo que transité por ese estado por cerca de 10 años de mi vida.
¿Puedes imaginarlo? Una década entera con pensamientos negativos, quejándome de lo que era, frustrado, sin poder relacionarme con las personas como un igual, sino como alguien inferior, alguien que merecía muy poco. Era difícil convivir conmigo mismo, mucho más con los demás. Recuerdo un periodo en el que incluso me la pasaba vestido de negro, sin mirar a los ojos a las personas. Muchas cosas pasaron, muchas derrotas, hasta que simplemente me cansé de perder, me cansé de ser un mediocre, me cansé de hablar en voz baja, me cansé de avergonzarme de mí mismo y empecé este camino, que no ha sido fácil pero ha sido muchísimo más satisfactorio, ha sido renacer de las cenizas, ha sido ver la vida en colores, no en blanco y negro, con alegría, disfrutando el sólo hecho de respirar, de ver el firmamento, de caminar, de disfrutar de la compañía de los demás. Ha sido un camino hacia la realización personal, no ha sido un camino simplemente hacia la realización afectiva y emocional, ha sido un camino que recorre todas las dimensiones de la vida.
Recuerdo que cuando buscaba ayuda en otros y les preguntaba cómo tener más confianza en mí mismo me decían “recuerda que eres especial”. Bueno, no era fácil sentirte especial cuando no te quieres ni un poco, o acaso era especial en el sentido de ser un fenómeno, o de ser una “rareza”. Bueno, esa idea de ser “especial” no ayudaba mucho. A veces sentía que el problema no era sólo mío, quizá estaba preso en una generación que no se quería mucho a sí misma, y como un ciego no puede guiar a otro ciego desistí del consejo de los demás, y me dediqué a leer y a modelar a ciertas personas que para mí eran exitosas. Recuerdo a un amigo mío que se llamaba José Ricardo, era un tipo casado, con un excelente puesto en mi universidad, con una disciplina y enfoque a prueba de todo, siempre que me veía tan perdido me invitaba a que le ayudara en cosas de la universidad.
Recuerdo que muchas veces lo evité y me frustraba mucho no poder darle la talla en lo que pedía que hiciera, y recuerdo que era porque pensaba que no sería capaz de cumplir (otro síntoma de la falta de amor y confianza que me tenía), así que antes de dar oportunidad a que me rechazaran pues abandonaba esas tareas. Esta persona sin embargo seguía insistiendo, y cada vez que me lo encontraba empezaba de cero conmigo y me contaba sus historias inspiradoras de sus logros. Lo interesante es que algunos años atrás yo lo había conocido cuando no tenía un peso y no tenía nada, pero tenía la disciplina y el enfoque que lo llevó hasta el triunfo.
Este amigo mío me contaba sus sueños, y cómo había alcanzado sus logros, y viéndolo en acción confirmé que su constancia y disciplina era lo que hacían la diferencia. Recuerdo que en aquel entonces me recomendó un libro sobre liderazgo, los “siete hábitos de la gente altamente efectiva” de Steven Covey. Cuando pude lo compré y me lo devoré y empezó mi cambio.
Cuando un proceso se dispara es como una bala saliendo de un revolver: simplemente sigue su camino hasta lograr su propósito. Yo pensaba que lo que me faltaba era cambiar de ropa, o cambiar de cara o de cuerpo para lograr sentirme mejor conmigo mismo y para atraer más, y no, lo que necesitaba era enfoque, mejorar mi capacidad de concentración, mi disciplina, mi visión frente a la vida, reconocer mis bendiciones y dones y ponerlos a trabajar, en vez de quejarme por mis aparentes desgracias, limitaciones y carencias.
Todo es cuestión de percepción: hay ricos que son miserables, hay miserables que son enormemente ricos. Decidí ir por el camino de sentirme rico. ¿Cómo pasa eso? Bueno, la psicología lo llama tener un insight, los religiosos lo llaman tener una epifanía. Es que tu pensamiento cambia, evoluciona, crece. Es como si en un punto dijeras “Oh, ya lo descubrí”, a unos les llega en un momento, a otros temprano en la vida, a otros más tarde. Hoy día veo a muchos de mis alumnos que no llegan a los 20 años y muestran una sed insaciable por mejorar y digo “vaya, a estos les irá de maravilla, si yo hubiera tenido esa misma sed a los 20 años”. Si eres de los que descubre esto tarde, quizá como yo, piensa que tú pones tu ritmo y que al final eres el responsable de tu propia carrera al éxito y lo importante es comenzarla, de nada vale quejarse por haberla empezado tarde. La vida es una sola, para qué gastarla en quejas.
Las primeras en darse cuenta del cambio fueron las mujeres, con su sensibilidad y su atención natural al detalle descubrieron un cambio interno que se veía desde el exterior, recuerdo que cambié mi ropa, no más negro a menos que fuera muy elegante, más colores, más tenis, más libertad. Llegó la literatura de la seducción y descubrí cómo funcionaba la mente femenina y cuán equivocado estaba en mi forma de ver las relaciones, la seducción y a mí frente al sexo opuesto, empezó mi camino hacia el balance emocional, mucho ensayo, mucho error, luego éxitos, luego como un nuevo rico los excesos y la vanidad, luego tropiezos que te enseñan a escoger mejor, a pensar con más sabiduría, y se sigue aprendiendo y se sigue este camino ya con otros retos y desafíos.
Si aún no te animas a caminar, empieza ahora! Y no pensando en tener mujeres, piensa en tener éxito y cree que llegarán las personas que necesitas, y que necesitas saber cuáles te convienen y cuáles no. Muchos lectores me escriben en verdaderos estados de angustia por algún rechazo, alguna mujer que parece no prestarles atención. A algunos les respondo que viajen al futuro y vean su vida en cinco años, que seguramente verán que esa preocupación no es nada, que el objetivo no debe ser una mujer en particular, llámese Laura, Megan, Lola, Panchita, o como sea, el objetivo debe formularse así “deseo lograr un balance emocional y afectivo que me haga sentir pleno.” Te sorprenderías si te dijera que para muchos es mejor pasar un buen tiempo solos antes de meterse en una relación. ¿La razón? Aún no tienen los recursos para transitar por una relación de pareja con éxito, manejando elementos como la ansiedad, la paciencia, el liderazgo, incluso el desprendimiento de saber que si algo no sirve es mejor dejarlo ir.
La confianza en uno mismo es un no es un simple elemento, es un completo sistema. Cuando las personas empiezan a tener éxitos se vuelven impacientes, quieren uno detrás de otro, y quieren más y más y más. Uno escucha en la publicidad que le ofrecen a uno cosas como “haz ESTO y tendrás resultados”, pues bien uno hace ESO y no tiene los resultados esperados, no hay un solo camino, o una sola píldora, o un solo programa de ejercicios para lograr lo que deseas, es necesario tomar cosas de muchas partes.
Es necesario saber que el crecimiento es un sistema. Lo que he aprendido y descubierto es que el crecimiento se da en tres aspectos:
1. Cuerpo
2. Mente
3. Espíritu
Si trabajas sólo uno, por ejemplo, solo el cuerpo serás un perdedor bien disfrazado, si trabajas sólo la mente serás un perdedor sabio, y si solo trabajas tu espíritu serás un perdedor idealista.
Necesitas trabajar tu cuerpo, tratarlo bien, dejar hábitos que te quiten energía, hacer más ejercicio, comer mejor, tomar más agua, en la medida en que lo trates mejor así cambiarán tus emociones. Algunos de mis clientes llaman mi atención por el notable descuido físico que tienen, y no me refiero a su ropa, sino a que se han descuidado físicamente, no caminan bien, no se ven saludables, parecen enfermos, lo primero que hago es hacerles ver que no se ven de la forma en que deberían verse, empezamos diseñando un plan para fortalecer su cuerpo, para exigirlo, y para moldearlo, para desintoxicarlo, para aceptarlo en el caso de que exista algún tipo de limitación o defecto visible.
Recuerdo que cuando empecé a practicar, trasnochaba casi todas las noches, y noté los efectos físicos de esa actividad, me enfermé, a veces simplemente me sentía sin energía, a veces respondía estupideces, como si mi cerebro estuviera en reposo. Aprendí que no siempre más es mejor y me dediqué a darle equilibrio a eso, salía menos pero buscaba ser más efectivo, aprendí que dormir bien me restauraba y me hacía saludable, al igual que despertar temprano ayudaba a mi enfoque y concentración. No tiene ninguna gracia acostarse a las 4 am y levantarse a las 11 am, descubrí que levantarme tarde me quitaba energía y bajaba mi estado de ánimo. Me di cuenta que las ideas negativas aumentaban cuando estaba cansado y cuando no estaba durmiendo bien.
Seguiré trabajando los elementos restantes el próximo jueves, necesitamos saber cómo equilibrar mente y espíritu, y más aún, cómo generar disciplina. Si me ganara 1 dólar por cada aprendiz que tiene el disco duro de su computador lleno de ebooks de seducción y que no los lee me haría rico…
Que comience la cacería!
Hasta la próxima!

0 comentarios:

Publicar un comentario